¿Por qué se debe cambiar la correa de distribución?
• Cumplimiento de su periodo de vida útil o cuando se repare el motor.
• Cuando se compra un vehículo usado, así le digan que fue cambiada.
• Cuando se sospeche de la calidad de la correa.
• Presencia de cuarteaduras (no es fácil de ver).
• Superficie deshilachada (aunque no es algo fácil de ver).
• Presencia de aceite en su superficie (debido a un retenedor dañado).
• Engranajes sobre los que trabaja desgastados o con filos, (estos también deben ser cambiados por seguridad).
• Utilización del vehículo en lugares polvorientos; el polvillo se convierte en un abrasivo que la desgasta.
• El calor del motor y el roce contra los piñones genera temperatura que la deteriora.
• La flexión normal contribuye también a su deterioro.
¿Qué causa su rotura?
Puede causar un daño severo en motores que cuentan con un árbol de levas a la cabeza, logrando provocar que las válvulas golpeen a los pistones destruyendo ambas partes. En algunos motores actuales su diseño permite que pese a la rotura de la correa el motor no sufra daños, de igual manera es recomendable cambiar la correa cuando sea necesario.
¿Cuánto vale el cambio de la correa de repartición o distribución?
El precio medio de cambiar la correa de distribución oscila entre 250.000 a 500.000 depende del motor del vehículo y el modelo
¿Qué pasa cuando se daña la correa de distribución?
En los casos en los que la correa se rompe o se corta inesperadamente, el motor pierde su sincronización. Es decir, los pistones golpean repetidamente las válvulas, lo cual puede provocar que se doblen o que se rompan totalmente.